Hace años que las hamacas de interior cautivan a los amantes de los mas diversos gustos. Hoy te contamos mucho más de este fascinante accesorio que el estilo nórdico ha traído de nuevo a la palestra.
Una hamaca de interior es un encuentro con conocimientos ancestrales y emociones que remontan al regazo materno. ¿Que puede ser más acogedor que sentirse al mismo tiempo abrazado y mecido con esa sensación de levitar? Hoy, te traemos las más codiciadas hamacas de interior.
Los tipos de hamacas de interior
Los tipos de hamacas de interior se definen por el tipo de tejido, su origen y los materiales empleados. En principio, provienen de conocimientos muy antiguos. Algunos atribuyen su origen a las culturas primitivas más antiguas y sofisticadas de América. Las formas de los tejidos, relatan siglos de historia de una técnica que ha dejado un legado en los implementos de interiores. Lo fundamental, aparte de la comodidad que implican para el descanso, es su belleza y gracia evocadora. Los materiales más empleados son los hilos de fibra de algodón y las fibras sintéticas, pero también se emplea madera, tela, lona, entre otros. Los nudos pueden ser apretados, ideales para resguardarse del frío; o abiertos que resultan mejores para el verano. Estas últimas, mayormente son tejidas a mano con agujas, tipo crochet, o con el sistema de anudado a mano llamado: macramé.
Hamacas de interior que embellecen
Por su apariencia sutil y el caracter orgánico que le otorgan los grandes flecos, las hamacas de algodón con flecos son las más codiciadas. Además, se tejen a mano en una combinación de sistema de agujas, croché y a mano con macramé, toda una proeza. Con este sistema se hacen también, la mayoría de las sillas hamacas. Por último, tenemos otros tipos de hamacas de interior menos convencionales, hechas de fibras de bambú, que se disponen en estructuras colgantes. Todas quedan ideales en un espacio de estilo Hygge, o nórdico. Pero, en un ambiente rústico, shabby chic o clásico romántico, también quedarían preciosas. Otras, como las de tela, mayormente se usan de lona a las que se le colocan refuerzos y aros remachados para los cordeles desde donde se cuelgan.
Una cama-hamaca de antología
Esta particular hamaca cama, está hechas con troncos de madera liviana, unidos entre si con sisal y clavos. Lo que nos demuestra es que no hay limitaciones para derrochar estilo con las hamacas de interior. Una tendencia que se colgará de tu deseos por largo rato.