Cada 8 de diciembre tiene lugar una de las tradiciones más especiales de la navidad: la decoración del arbolito de navidad. Entre enredos, luces, risas y un sentimiento de esperanza, nos abocamos a darle vida al protagonista de la decoración navideña. Hoy, queremos unirnos a esta actividad, por eso te traemos esta guía fácil para armar el arbolito de navidad en 7 pasos.
Seguro ya tienes definido el sitio, los colores, el estilo y el color para decorar tu árbol de navidad. También habrás preparado el pie de árbol para cubrir la base. Y si, decorar el arbolito es una actividad muy particular en cada familia. Sin embargo, muchas veces, el resultado no nos complace del todo. Si te preguntas porqué a otras personas les queda el arbolito como sacado de revistas, te diremos que si existe no un truco ¡si no toda una ley! Y hoy te vamos a contar de qué se trata.
Armar el arbolito de Navidad en 7 pasos:
1. Coloca los adornos a la mano en una mesa
Las cosas salen bien si se hacen en orden, aunque tratándose de este acontecimiento, un poquito de caos con los niños y las mascotas es inevitable (Y divino). Además, es una actividad para pasarla bien. Así, que lo que tienes que hacer es incorporar a los niños en la selección y organización de los adornos. Permíteles ser parte del diseño, pidiéndoles que realicen algunos adornos sencillos para el arbolito.
2. Instala las luces en el arbolito rodeando el mismo e insertándolas entre las ramas.
La forma de colocar las luces en el arbolito dependerá de la segmentación que más se adapte a tu gusto. Puede ser: En arcos invertidos, en línea recta vertical o de forma casual. Este último es el más empleado, y consiste en acumular las luces sobre las ramas de manera informal. Antes de colocar otros adornos, realiza una prueba. Cierra las cortinas y otras entradas de luz para visualizar la forma que ha quedado en las luces.
3. Arregla las cintas, guirnalda, tul, telas o mallas dándoles un patrón.
Hay tres patrones básicos para: en espiral, colgante y zigzag. Pero además, las cintas se colocan: estiradas, en arcos o alternando moños. La combinación dependerá de la forma y cantidad de cinta disponible. Colocar tul, mallas o telas vaporosas, le proporciona al arbolito un aire etéreo, delicado y sutil. El brillo de las luces que se deja ver a través de las transparencias resultan simplemente evocador.
4. Colgar las bolas y adornos según ¡La ley de la composición!
Aunque no lo creas la decoración del arbolito responde a las leyes de la composición. Muchas personas lo hacen de forma instintiva, pero siempre se trata de equilibrio y variedad. Para lograrlo, crea segmentos imaginarios en el arbolito y coloca en cada área un grupo variado como sigue:
- Varia los tonos (de oscuros a claros) si lo decoras de un mismo color
- Diversos tamaños, si lo decoras en tonos metalizados o colores semejantes.
- Variedad de texturas y tamaños si decoras con adornos de formas muy diferentes.
5. Qué hacer con los espacios vacíos
En los espacios vacíos es donde entran en juego los adornos como las flores, ramas con brillantina o mazos decorativos. Pero también, esos adornos especiales como las antigüedades, los ángeles o los hechos por los niños. Eso si, siempre combina con alguna característica de los demás adornos: el mismo color o la misma textura.
6. El pie de árbol
El pie del árbol de navidad debe estar siempre despejado. Sin embargo con suficiente espacio, es bonito disponer una alfombra de un color a juego para que los niños se sienten a destapar los regalos.
7. Ahora si, culmina con la clásica estrella
Aunque la clásica estrella que decora el arbolito de navidad en el tope, ha dado lugar a una infinidad de opciones, nunca debe faltar como signo de guía y esperanza. Además, es uno de los momentos más fascinantes para los niños ser alzados y colocar la estrella como punto cumbre de la actividad. Si quieres optar por otros elementos los más apropiados son: ángeles, moños y arreglos.