Si te gustan los pisos flotantes blancos, descubre en esta nota cuáles elementos decorativos les favorecen y sobre su mantenimiento. Los pisos blancos están de moda y constituyen un ejemplo divino de la importancia de seleccionar bien los materiales más expresivos en la decoración.
El blanco está calificado como el icono por excelencia de la pureza y la virtud. Para los artistas no se define como un color, sino más bien, como la ausencia absoluta de éste. Pero ello no lo exime de poseer múltiples cualidades semánticas que lo relacionan con la paz, la elevación y con un estado superior de espiritualidad. Eso nos da una idea de la personalidad de quien elige el blanco como el color para su piso. Si eres uno de ellos, estos tips, son para vos.
¿Cuáles estilos son más apropiados para los pisos blancos?
Los pisos flotantes y de madera no se limitan a un estilo particular, al contrario, permiten una total libertad y adaptabilidad decorativa. Sin embargo, los pisos flotantes blancos casan muy bien con estilos como el minimalista, el nórdico y el shabby chic. ¿la razón? Es porque estos son estilos que procuran una base neutra más clara para enfatizar su carácter diáfano. El piso blanco en una habitación shabby, por ejemplo, deja más libertad para jugar con los colores pastel.
Pisos flotantes y ¿plantas?
Las plantas son las aliadas perfectas para complementar la fuerza orgánica de los pisos flotantes y de madera. Ahora bien, sean blancos o de otro color, la madera es altamente sensible a sufrir daños por humedad. Mantén las maceteras en bandejas y asegúrate de verter la cantidad exacta de agua para no derramar. Lo ideal es decorar con plantas como las epifitas y las suculentas que no ameritan casi agua. Otra opción son los helechos, colocándolos juntos para que conserven mejor la humedad.
Y… ¿si me gustan las texturas?
Un piso flotante blanco no es razón para la simpleza. Si te agradan las texturas y colores, aprovecha la cualidad del blanco para derrochar tu personalidad por doquier. Las paredes con materiales poco convencionales, como el ladrillo y las pátinas de decapado que están muy de moda y son fáciles de hacer, lucen espectaculares con un piso blanco.
Mantenimiento
A diferencia de los pisos oscuros, el polvo casi no se nota en los pisos flotantes blancos. Pero es importante tener presente que el polvo y partículas que entran a la casa podrían tener suficiente dureza como para convertirse en un elemento abrasivo. Con lo cual, cualquier fricción de pisadas, desplazamiento de muebles, etc., podrían rallarlo. Para evitarlo, coloca alfombras en las entradas y debajo de los muebles donde el tráfico sea más intenso.
Las características que se le atribuyen al blanco en estudios de la psicología del color, apuntan a la personalidad “soñadora” de quienes lo prefieren para los pisos. Así que, sólo déjate llevar por su diáfana apariencia, porque el blanco, está de moda.